Jesús nos da fuerzas

Job es un conocido personaje de la Biblia que sufrió mucho, perdió la familia, la salud y los bienes. Job deseaba morir. El no tenía ninguna esperanza de que sus problemas se solucionaran. El se sentía abandonado por Dios y no tenía condiciones de seguir luchando por la vida. En fin, estaba desesperado. ¿Ya te has sentido así? Muchas personas terminan sacándose su propia vida por no encontrar una solución a sus problemas. Job no se mató. El fue ayudado por Dios, en el tiempo de Dios, y superó sus graves problemas. Busca la ayuda de Dios. Él te ama y quiere ayudarte. La mayor prueba de esto es que envió a Jesucristo quien vino con la misión de terminar con el mayor de todos los sufrimientos: La muerte eterna. Jesús es tu fuente de energía, la fuerza muy presente en tiempos de dificultad. Confía en Él y tu vida se llenará de fuerzas y energía.

Oremos: Señor, gracias por el perdón de mis pecados. Como es bueno saber que Jesús es mi fuerza. Amén

“Así el pecado no tendrá poder sobre vosotros, pues ya no estáis sometidos a la ley sino a la bondad de Dios” (Romanos 6:14)