Caminos de Dios

Cuantas veces en nuestra vida creemos que todo anda mal. Tantas veces reclamamos y llegamos casi a desanimarnos, creyendo que Dios está llevándonos por caminos erróneos. Y, cuantas veces, más tarde, descubrimos que el sufrimiento del pasado terminó transformándose en bendiciones. Así son los caminos de Dios, muchas veces no lo comprendemos. Hay veces que los caminos de Dios son incomprensibles, pero ten la certeza de una cosa: Si confías tu vida a Dios, entonces no tienes nada de qué preocuparte. Al final, el mayor de los problemas Dios ya resolvió: La muerte eterna. Dios envió Su Hijo Jesús para salvarnos de la condenación que merecíamos por nuestros pecados y nos dio la vida eterna. ¡Confía en Él!

Oremos: Gracias Señor, por dirigir mi vida. Nada sucede por acaso. Todo está en Tus manos. Fortalece mi confianza en Ti hoy y siempre. Amén

“No podemos comprender al Todopoderoso, pues él es inmensamente fuerte y justo; es recto y no oprime a nadie” (Job 37:23)